En busca de...

Este es un espacio que tiene como único objetivo abrir el debate para dar paso a la reflexion. En él, queridos amigos/as, se encontraran con acontecimientos, situaciones y, por sobre todas las cosas, reflexiones sobre la vida misma. Cualquier coincidencia y/o similitud que encuentren con la realidad fue intencionalmente buscada.
El futuro es nuestro, por prepotencia de trabajo. Crearemos nuestra literatura, no conversando continuamente de literatura, sino escribiendo en orgullosa soledad...

Sin más que agregar, saluda atte.


RFXO.



martes, 15 de marzo de 2011

Ser o no ser

El otro día mientras paseaba, disfrutando de una buen baño de sol, un pensamiento de tinte picaresco se me cruzo por la cucuza. Súbitamente surgió en mi la imperiosa necesidad de tocar el timbre en cualquier casa evocando de alguna manera fraudulenta el por siempre inmortal rin- raje que todos supimos disfrutar cuando niños. Mi sensación de picardía se desvaneció en el momento en que, del otro lado del portal de una casa muy paqueta, se oyó la voz de una empleada doméstica que pregunto por millonésima vez en su vida con melancólica resignación y tímida tristeza: ¿quién es?...
¡¿Quién soy?! ¿Quién puede estar preparado para semejante pregunta? ¡Qué levante la mano aquel que crea estarlo, así el resto de los simples mortales lo aplaudimos! 
Inmediatamente quede absorto, sumergido en una profunda reflexión intentando dilucidar semejante duda. Sin darme cuenta llegue a la plaza, miré la estatua de Mitre - sobre la cual las palomas ya habían dejado su opinión- y me dije a mi mismo que lo mejor no es preguntar quién sino qué es uno. Así, para tranquilidad de algunos - y desesperación de otros- se podría contestar: soy lo que hago, si no hago no soy. Me hincho de felicidad ante la idea de que puedo ser solo por hacer, ya que así solo por medio de grandes acciones puedo llegar a ser un gigante.
Por mi parte, yo hoy no soy nadie pues nada hago. Cualquier mocito envalentonado podría retrucarme mi carencia de ser, ya que al fin de cuentas, vivito y coleando estoy. Pero me gusta pensarme a  mi mismo más allá de mi físico y mis funciones fisiológicas. De esa manera, podrán entender que estoy... pero que no soy. Estoy porque hoy y aquí me encuentro, ocupando un lugar y un momento en la tragicomedia humana (que ultimamente tiende a generar más llanto que risas) Pero que no soy nada ni nadie, pues estando cansado de tanta injusticia cometida con total impunidad tanto por parte de nuestros electos representantes como por aquellos que no elegimos ( estoy hablando de canas, curas y demás yerbas vendidas al pueblo como algo necesario) nada hago para cambiar la situación en la que vivimos. Por eso, nunca vamos a llegar a ser individuos - mucho menos pueblo- en tanto y en cuanto no nos sacudamos de encima la modorra que nos anestesia y comencemos a actuar. Todos somos responsables de educar para libertad, de generar conciencia, de dar tan solo un empujoncito a otra persona para que continúe la lucha legada por otros compañeros de ruta. Solo de esa manera - por medio de la acción- seremos, y en cuanto seamos... ejemplifiquemos, eduquemos y así, como individuos libres, generaremos una rueda que nada ni nadie pueda frenar. Basicamente... ser o no ser, esa es la cuestión.   

lunes, 7 de marzo de 2011

Apertura

¿Estamos listos?... Bueno, pero sepamos que ya no hay vuelta atrás. Las bombas ya están armadas y ubicadas, solo falta encender la mecha. ¿Alguna duda?...

¡¿De qué están hechas?!

¿Acaso no es obvio? ¡Mi nombre lo dice todo! De todas maneras permitanme una breve explicación. No duden que en su interior descubrirán el material más explosivo que este otario descarriado pudo encontrar. Tan etéreo como el alma misma y tan duro como el asfalto. A la larga, se van a dar cuenta que tiene la doble ventaja de ser transparente como el aire, y al mismo tiempo, de tener la fuerza de mil huracanes. No se dejen engañar por su inocente apariencia. Usadas correctamente, las palabras pueden provocar destrozos... Van y vienen constantemente, viajan de incógnito sin ser detectadas, se reproducen infinitamente y cuando uno menos lo espera pueden llegar a rodear con un ataque implacable y ensordecedor a cualquier individuo que ose ponerse en su camino. 

¡¿Dónde las vamos a ubicar?!

Esa es la parte más fácil mis queridos amigos. En la cabeza de cada uno de nosotros contamos con un arsenal de ellas dispuestas a ser lanzadas a gusto y placer contra aquellos personajes que creen manejarnos, contra aquellas instituciones que intentan asfixiarnos. Todos y cada uno de nosotros somos agentes potenciales de cambio, solo hace falta activarnos. Constantemente compramos el discurso de nuestros "dirigentes"... es hora de que prueben el fuego cruzado de nuestras bombas gramaticales. Llegó el momento de que se desmoronen los castillos de naipes donde se esconden y se caigan los disfraces de sus cuerpos... llegó la hora de la revancha... llegó la hora de reflexionar... llegó la hora de El Reflexionario.

No les voy a mentir, el viaje va a ser muy duro. Van a putear y reputear contra dios y todos los santos. Van a reír y a llorar, a gritar y a suspirar. Pero les prometo una cosa: los voy a llevar a lugares que no podrían ni imaginar, tan cercanos y a la vez tan lejanos... no solo los voy a llevar sino que van a ver, sentir y pensar lo que yo vea, sienta y piense. De esta manera, no van a estar solos. Vamos a putear y reputear juntos... a reír y a llorar al unísono... a gritar y a suspirar codo a codo. 

Por eso vuelvo y pregunto: ¿Estamos listos? Las bombas ya están armadas y ubicadas... solo falta encender la mecha...